(Por Prof. Fernando “Cocó” Maineri)
La Organización Mundial de la salud define un buen estado de Salud como “un completo estado de bienestar físico, mental y social” y no solamente la ausencia de enfermedades.
Además, la OMS aboga por la atención de la salud física con la mental porque no hay salud física sin salud mental.
La salud mental abarca un una amplia gama de actividades directa o indirectamente relacionadas con el componente de bienestar mental incluido en la definición de salud que da la OMS, completo estado de bienestar físico, mental y social. La salud mental es motivo de nuestra atención y por una buena razón. Un cuerpo saludable puede prevenir ciertas enfermedades, como afecciones cardiacas y diabetes, y ayudarte a mantener tu independencia a medida que envejecés.
La salud mental es igual de importante que la salud física, una va de la mano con la otra, y no hay que descuidarlas.
La salud física es el bienestar del cuerpo y el óptimo funcionamiento del organismo, que se encuentran en buen estado físico, mental y emocional.
Según la OMS al definir salud, hace mucho hincapié en la importancia de abandonar la parte física nuestro cuerpo como un todo e integrarla a las áreas social y mental, de esta manera la triada cuerpo-mente-social son determinantes para un estado óptimo de equilibrio en la salud general.
La salud física es esencial para el mantenimiento y la prevención de las enfermedades, para todas las personas y a cualquier edad. La actividad física contribuye a la prolongación de la vida y a mejorar su calidad, a través de beneficios fisiológicos, psicológicos, y sociales.
Existen varios beneficios de tener una vida saludable, pero el principal de ellos es que nuestro cuerpo se libera de las diversas formas de trastornos y complicaciones y, por lo tanto, se obtiene una vida más larga, sin sufrir demasiados tipos de dolores o malestares.
El ejercicio físico ayuda a prevenir gran cantidad de enfermedades, a perder y/o mantener el peso ideal, disminuye el riesgo de lesiones, regula la obesidad, diabetes tipo 2, hipertensión, combate el síndrome metabólico del sedentarismo…en fin, el ejercicio físico puede ayudar a mantener el cuerpo en un peso y forma saludable.
Sugerencias para conseguir o mantener una buena salud;
Practicar deportes-
Respetar el descanso-
Mantener una alimentación adecuada y saludable-
Cuidarse de las grasas trans, saturadas.
Ingerir frutas y verduras-
Evitar el estrés.
Evitar el tabaco y el alcohol-
Realizar 5 comidas diarias. Hidratarse correctamente.
Es totalmente recomendable la práctica de ejercicio físico, deportes, desde temprana edad hasta llegada la adultez, el “único” medio efectivo, comprobado científicamente para mantener una buena salud, vivir más y mejor.