Debido a esto, los Trenes se vieron muy afectados, tanto de pasajeros como de carga.
Los cargueros tuvieron que utilizar una ruta alternativa (desde Laboulaye vía Melincué y Hughes, hasta retomar la principal en Junín), la cual les aumenta el tiempo de viaje sumandole 167 kilómetros de más, atrasando todo e incrementando 24 horas más de viaje.
En cuanto al servicio de pasajeros de Larga Distancia que unía Retiro con Rufino, tuvo que ser recortado hasta Junín.
Después de 4 años, afortunadamente las obras de reconstrucción del pedraplén son una realidad, y avanzaron a buen ritmo, a tal punto que ya están finalizando.
Se estima que en unos pocos meses se volverá a habilitar este tramo como vía principal (como lo fue desde siempre), para que los trenes vuelvan a funcionar con normalidad y recuperen horas de viaje.
Incluso con esto, volvería la extensión del Larga Distancia a Rufino.
En imagen podemos observar uno de los varios trenes que se enviaron con vagones cargados con piedras para balastar todo el pedraplén.
El de la foto en este caso fue con la Locomotora CRRC CDD5A1 – 9456 al frente.
(Transporte argentino)