(Por Prof. Fernando «Cocó» Maineri)
Si bien aún estamos transitando el otoño, estamos a pocos días de comenzar una nueva estación del año en circunstancias totalmente desacostumbradas. Un nuevo año que nos tiene, aún, dominados por el miedo y la enfermedad.
No resulta fácil abstraerse y centrar las energías en potenciar nuestra salud y sistema inmune, pero considero de vital importancia la realización de una actividad física sistemática, controlada y cuidada.
El otoño – invierno resulta ser una época un poco esquiva para quienes realizan la actividad física al aire libre, pero esto no debe ser un impedimento para llevarla a cabo. Es más, hoy, es necesario hacerlo, desde pequeñas caminatas, trote, bicicleta, la utilización de plazas, parques, etc. es útil para mantener una vida saludable.
Seguramente cada uno tiene horarios y tiempos diferentes, pero será adecuado respetar las normas vigentes y protocolos sanitarios al hacerlo. El virus no está en la atmosfera!!!
Es necesario recurrir a la voluntad, ya que la actividad normal que cada uno tenía en el día a día, se ve alterada, lógicamente, por la realidad.
En el caso de la actividad física al aire libre en tiempos invernales, frío, lo primordial es no enfermarse, es decir, tomar los recaudos necesarios de cuando se lleve a cabo la tarea, que el tiempo acompañe, tanto así como la indumentaria elegida para hacer ejercicio físico. Bastarán con estímulos de por lo menos 30 a 40 minutos diarios.
Otra variante a tener en cuenta y simple-cómoda es hacer ejercicio en tu casa, 20 minutos serán suficientes, para estimular el sistema osteo-artro-muscular, ocupar tu mente en algo positivo apuntando a la salud.
En tu casa podés entrenar, ejercicios simples, desde cualquier tipo de locomoción (por más que sea un espacio cerrado o reducido), cambios de nivel, empujes, tracción y rotación serán suficientes. No importa la cantidad ni el tiempo, si la calidad!!! Y continuidad.
La actividad física te permitirá estimular tu sistema inmune, psicológico y corporal en general, te mantendrá activo, de buen ánimo, y colabora directamente en tu salud física.
Ejercicios como sentadillas, estocadas, flexiones de brazos, todas las variantes de abdominales, de pie y acostados, movilidad articular, saltos, posturales, rotaciones, etc., serán de suma utilidad.
Otra variante es concurrir algún Centro de actividad física, donde se respeten los protocolos de salud, la cantidad de concurrentes y lo más importante, que esté siempre “ventilado”, teniendo como premisa la higiene y el cuidado personal y del otro.
Y por último existen grupos, personas dedicadas a clases on line, donde se realizan clases individuales o grupales para hacer actividad física en casa.
Cualquiera de las variantes que elijas, lo primero es LA SALUD, y no existe actividad, remedio o terapia más efectivo para mantenerla que la actividad física.
¡¡Científicamente comprobada desde hace AÑOS!!!
Desde este espacio, invitamos a que no dejes de moverte, el movimiento es vida, siempre teniendo presente los protocolos necesarios de cuidado y respeto para con uno y con los demás. Si cada uno se cuida y cuida de los demás, la lucha será posible y la batalla será un triunfo social.
