(por Lic. Hugo Merlo)
No voy emitir opinión solo por respeto a los que saben del tema, sino una serie de consideraciones, PENSANDOLO DE UNA MANERA DIFERENTE, no tanto la enfermedad, sino desde otros aspectos…
Me preguntaba, asumiendo que las guerras tradicionales no existen más, que ahora la guerra es con misiles, drones, etc., a distancia, impersonal, como si la viésemos por TV.
Me lo imaginé así: El tipo sentado en su PC tira el misil desde un centro de logística de tiro, una oficina a 1000 km distancia del objetivo, dá en el blanco y mata 400 tipos, él no lo sabe, el jefe lo felicita y a las 20 hs. termina su jornada y llama por teléfono a su mujer.
-Hola querida, estoy por tomar el bondi, pero voy tardar porque es un kilombo de tránsito.
-Ah bueno, pasá por el chino y tráeme bolsas de residuos de 50×70.
¿Cómo se imagina Ud., querido lector, una guerra bacteriológica? Antes y después del coronavirus.
“Esto es una guerra” dijo el presidente de Francia, “el virus chino” dijo el de USA.
Si pregunta ¿cómo apareció? Le dicen que “mutó”, empecemos a ver dónde mutan los virus, no sé nada de esto, pero, así nomás, solamente porque en otra parte del mundo comen ratas y murciélagos aparece un virus que puede matar a millones de personas.
No tenemos todas las respuestas y es doloroso, pero lo que duele más es no tener las preguntas correctas. Trato de buscar la pregunta correcta de la época, de estos tiempos, y no engancharme solamente con la parte ruidosa del problema. Antes de gastar tiempo y recursos, es necesario definir el problema de forma adecuada, es más… redefinir el problema si es necesario.
Parece que definitivamente nos contagiaremos, el problema es que hay que contagiarse de a poco (achatar la curva), porque sino los recursos humanos y técnicos serían insuficientes. Siempre después de acontecimientos traumáticos aparece un nuevo estado de cosas, por. Ej. después de las guerras Mundiales, de la crisis del 30, aparecieron los Estados, Economía del Bienestar etc. Por eso, sin duda, las pandemias futuras seguramente serán atendidas con nuevos conceptos. También el trabajo desde el hogar ocupará un lugar en los nuevos empleos, porque hoy está siendo probado como alternativa.
La sabiduría CONVENCIONAL SE HA PEGADO UN PORRAZO, eso que era aceptado despreocupadamente, el sentido común, está temblando. Hoy lo que reina es la incertidumbre y estados cambiantes.
La Sociedad en ciernes necesitará nuevos pensadores para examinar los ignorados problemas y hallar soluciones y nuevas formas de abordar la realidad. Habrá enfoques nuevos sobre los grandes temas de la sociedad, las enfermedades, el crimen, la política, son problemas de difícil solución y las raíces de sus causas no son tan evidentes.
Es bastante común que se gaste mucho dinero en la solución de los síntomas y lamentarnos cuando los problemas perduran. Las soluciones están en las causas-raíces de los problemas.
Volviendo al coronavirus, resulta un síntoma de que ¿alguien está haciendo algo mal? o solamente una mutación genética, como dice un amigo, capo en biotecnología, cambió “una letrita” en el ADN del bicho y pasó lo que pasó.
Lic. Hugo Enrique Merlo
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