Un organismo de Estados Unidos realizó las primeras estimaciones de la campaña sojera 2019/20 en los principales países productores de América del Sur, en las que se prevén un aumento del área sembrada en Brasil y una baja en la Argentina.
Según el Global AgriculturalInformation Network (GAIN), que depende del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, en sus siglas en inglés), Brasil incrementaría la superficie con la oleaginosa en 1%, mientras que la Argentina la reduciría en la misma proporción.
Pese a que la expansión de la superficie sembrada con soja en Brasil creció a una tasa anual del 4% en los últimos cinco años, para el próximo ciclo, según el GAIN, se espera una actitud más cauta de parte de los productores brasileños debido a la incertidumbre que provoca el conflicto comercial entre China y los Estados Unidos. China es el mayor consumidor mundial de soja, y para Brasil el gigante asiático representa el principal destino de sus exportaciones de poroto.
La producción, si se cumplen las estimaciones de rendimiento normales, se proyecta en 124 millones de toneladas, un 9% más que en el actual ciclo, calculado en 113 millones de toneladas. El rinde promedio fue calculado en 34 quintales por hectárea, cercano al registrado en las dos temporadas anteriores. Eso representaría un aumento de 8% si se lo compara con la campaña actual que llegó a 31,6 quintales por hectárea debido a la sequía que castigo a algunos estados productores de Brasil.
En cuanto a la proyección sobre exportaciones de poroto de soja de Brasil, el informe del GAIN las sitúa en 75 millones de toneladas, casi 9% más que en el actual ciclo.
Brasil se convirtió en el principal «beneficiario» del enfrentamiento entre los EE.UU. y China, con un incremento de 20% respecto del ciclo 2016/17 en los envíos.
Respecto de la Argentina, el GAIN estima una baja del área sembrada con soja debido a que los márgenes del cultivo son inferiores a los del maíz. El organismo destaca la incertidumbre que tendrán los productores argentinos en la campaña 2019/20 debido a la celebración de las elecciones presidenciales de octubre próximo que podrían determinar el triunfo de un candidato que incremente las retenciones. Además, señala que los productores no recurrirán al financiamiento bancario en pesos debido al alza de las tasas de interés. Estima que serán las compañías de insumos las que tendrán a su cargo el respaldo crediticio para la campaña.
Sobre los cálculos de producción para la Argentina, el organismo norteamericano calcula que llegará a 53 millones de toneladas, lo que represaría una disminución de 3% respecto de la actual campaña.