En medio de reclamos por la coparticipación, Diego Santilli toma el control político del Gobierno. Asume hoy como Ministro del Interior con la misión de tejer consensos federales sin romper el equilibrio fiscal. Primera prueba: el Presupuesto 2026.
Por Redacción ExtraDigital
En medio de tensiones y reclamos cruzados, Diego Santilli asume hoy (anoche se oficializó en el Boletin Oficial) como Ministro del Interior y estrena la lapicera política más sensible del Gobierno: la que reparte poder y busca votos para el Presupuesto 2026. Aunque la jura formal será en el Salón Blanco de la Casa Rosada, el Colo ya está en funciones desde hace varios días y comenzó una intensa ronda de conversaciones con los gobernadores, que dejaron un mensaje claro: sin acuerdo por la coparticipación, no habrá Presupuesto.
“La agenda del Presidente es clara: consenso sin perder el equilibrio fiscal”, respondió Santilli en los pasillos de Balcarce 50, consciente de que su desembarco implica mucho más que un cambio de nombres. Su papel será clave: reconstruir los puentes que el ajuste del Gobierno tensó con las provincias y darle una impronta política a la gestión libertaria.
Córdoba y San Juan, aliados en la foto
Este lunes, el flamante ministro recibió a dos gobernadores que eligieron mostrarse cerca: Marcelo Orrego (San Juan) y Martín Llaryora (Córdoba). Ambos llegaron con tono conciliador. Orrego aseguró que acompañará el Presupuesto y definió a los mandatarios como “los mejores aliados del Presidente”. Llaryora, por su parte, respaldó la reforma laboral impulsada por el Gobierno y calificó el encuentro como “positivo, cordial y productivo”. La Rosada celebra esas postales de apoyo moderado. “Fue una buena señal política”, deslizaron cerca de Santilli, que ya proyecta una agenda federal para la gira provincial que arrancará mañana miércoles.
Jorge Macri marca la cancha
El tono más duro llegó desde la Ciudad de Buenos Aires. Jorge Macri advirtió que, sin el pago de la deuda por coparticipación, no habrá respaldo al Presupuesto. “Hicimos un acuerdo en la Corte con el Gobierno. Las obligaciones entre Estados deben estar expresadas en el Presupuesto”, reclamó el jefe de Gobierno en diálogo con Radio La Red. Desde el entorno de Santilli relativizaron la tensión: recordaron que las conversaciones sobre coparticipación se venían manejando entre el ministro saliente y Economía. “Diego todavía no se reunió con Caputo, que estuvo de viaje con el Presidente. En las próximas semanas se empezará a construir una agenda conjunta”, aclararon.
El mantra del Colo
En privado, Santilli repite su fórmula: “Escuchar a los gobernadores, sostener el equilibrio fiscal y avanzar en las reformas estructurales”. La Casa Rosada ordenó su tablero político con prioridades definidas: aprobar el Presupuesto 2026, impulsar la modernización laboral, y avanzar con las reformas fiscal y penal que Milei quiere tratar en sesiones extraordinarias entre diciembre y el verano. El Colo llega con perfil de gestor y negociador, atributos que Milei necesita para amortiguar las fricciones con los mandatarios provinciales. En la Rosada lo describen como “un ministro político, pero con cultura de gestión”.
La rosca se muda al interior
A partir del miércoles, Santilli iniciará una gira federal que buscará consolidar apoyos. El punto de partida será Entre Ríos, donde se reunirá con Rogelio Frigerio. Luego seguirá con encuentros en Mendoza, Chaco, San Luis y Salta, donde el jueves se verá con Gustavo Sáenz.
En las próximas semanas, prevé mantener reuniones individuales con al menos diez de los veinte gobernadores que participaron del último cónclave encabezado por Guillermo Francos. Por ahora, no hay plan de un encuentro conjunto con Javier Milei. Los cuatro mandatarios peronistas disidentes —Axel Kicillof, Gildo Insfrán, Gustavo Melella y Ricardo Quintela— siguen fuera del radar inmediato. “No están en agenda”, se limitan a decir en Interior.
Santilli llega al Gabinete para ordenar la política y garantizar el músculo legislativo que Milei necesita. Su tarea es quirúrgica: construir consensos sin ceder el relato del ajuste. Con la jura prevista para este martes a las 15, en un acto “austero, con familia y amigos”, según su entorno, el Colo comenzará formalmente un recorrido donde cada reunión con los gobernadores será una pulseada y un test de gobernabilidad. La temporada de rosca en la Rosada recién empieza, y el Colo Santilli ya tiene su mapa en la mano.





