El banco estadounidense sugiere pausar sus inversiones en bonos en pesos por riesgo de devaluación y volatilidad política.
J.P. Morgan, una de las mayores instituciones financieras de Estados Unidos, advirtió a sus clientes que tomen un “respiro” en su exposición al mercado argentino de bonos en pesos, como las Lecaps, debido a la creciente presión sobre las reservas de dólares y la incertidumbre previa al proceso electoral.
La firma destacó que esta estrategia —conocida como “carry trade”— permitió obtener ganancias de hasta 10,4 % en dólares en los últimos meses, gracias a tasas de interés de cerca del 30 % anual. Sin embargo, alertó que ese nivel de rendimiento ya no está asegurado ante el riesgo de una devaluación del peso.
El informe advierte que el déficit en la balanza de pagos —impulsado por la salida de turistas y una menor recaudación de divisas por exportaciones agrícolas— apunta a una merma de los dólares en el país. A ello se suma la inestabilidad derivada de la campaña electoral, que ya motivó una intervención del equipo económico en el mercado de futuros del dólar. En ese contexto, J.P. Morgan recomienda migrar hacia títulos denominados en moneda extranjera.
Aunque la entidad mantiene una perspectiva “constructiva” a mediano plazo —destacando la estabilidad inflacionaria, el ajuste fiscal y la remoción de restricciones cambiarias—, considera prudente “tomar ganancias” y reingresar al mercado argentino cuando la tensión disminuya.
Respuesta oficial
En el Gobierno reconocen la relevancia de J.P. Morgan como inversor institucional —aunque no revela su actual exposición—, y advierten sobre el riesgo de una “profecía autocumplida”: que su salida generalizada intensifique la presión sobre el tipo de cambio.
El director del Banco Central y asesor del Ministerio de Economía, Federico Furiase, intentó restarle dramatismo al análisis: “Morgan se está haciendo eco del ruido electoral, y ese ruido responde más a declaraciones políticas que a fundamentos económicos”, sostuvo. Aun así, admitió que cualquier movimiento abrupto de grandes inversores puede generar volatilidad y presionar una revaluación del tipo de cambio.