En su sitio web, la empresa Kasoku, competidora de Airbnb, promueve ahora sus viviendas amuebladas como «refugios temporales» a disposición de quienes quieren escapar por un tiempo de sus familias, ya sea para trabajar más tranquilamente o para ventilar la mente. La iniciativa tiene lugar en Japón paro ya se está replicando en todo el mundo.
Aunque los japoneses no tienen prohibido salir de sus hogares el gobierno recomienda encarecidamente que se limiten los desplazamientos a lo esencial. El teletrabajo se ha extendido y las escuelas están cerradas.
Esta campaña de comunicación, lanzada el 3 de abril, habría atraído ya a una veintena de clientes, según Amano.




