Memoria, Verdad y Justicia fueron las consignas que lucieron las columnas del Recinto de Diputados de la Provincia. Del mismo modo, se dispusieron banners con nombre y reseña de Luisa Córica, Adolfo Berardi, Manuel Carricondo, Néstor Farías, Carlos Della Nave y Marcos Miguens, trabajadores de la Casa de Leyes desaparecidos durante la última dictadura cívico militar. Al pie del estrado, otra lámina se erguía con la figura de Ricardo de la Lama, diputado bonaerense del Frente Justicialista de Liberación (FREJULI), desaparecido el 30 de mayo de 1976 en la ciudad de Vicente López.
Previo al inicio de sesión, el titular del cuerpo legislativo, Manuel Mosca, llamó a realizar un minuto de silencio que finalizó con un enérgico aplauso de todos los presentes; posteriormente, las diputadas Liliana Denot y Valeria Arata, junto con sus pares Miguel Funes y Guillermo Escudero, izaron las banderas nacional y provincial, para dar paso a la entonación del Himno Nacional Argentino.
La primera intervención de la jornada estuvo a cargo del diputado de Unidad Ciudadana Miguel Funes, quien repasó los casos de los trabajadores y el parlamentario desaparecidos por el terrorismo de Estado. Al respecto, enfatizó: “Nos toca rendir homenaje a las compañeras y los compañeros que fueron trabajadores de esta Casa de Leyes”, por eso “vamos a proponer la creación de la banca 93, una banca que esté vacía en cada sesión, identificada con su nombre, el de su bloque, y su condición de compañero desaparecido. Ese silencio, esa banca vacía, que es irremplazable, nos va a marcar y va a generar una memoria activa cotidiana en cada una de nuestras sesiones”.
Posteriormente, la diputada de Cambiemos, Sandra Paris, tomó la palabra y sostuvo que “el 24 de marzo de 1976 se quebraba el orden constitucional argentino y se iniciaba el período más oscuro de nuestra vida institucional”. Y subrayó que “la muerte, el secuestro, la desaparición, la tortura, el silencio, el autoritarismo y el exilio pasaron a ser parte de la vida cotidiana”.
La referente de Cambiemos también recordó: “Mi padre fue desaparecido, torturado y detenido por las juntas militares”. Y agregó que “este tormento arrancó a los padres, a las madres y a los hijos; aún hay abuelas que siguen buscando a sus nietos, hijos que claman por sus padres y la sociedad que sigue pidiendo memoria, verdad y justicia”.
Por su parte, la diputada del Frente Renovador, Valeria Arata, señaló que “a pesar del paso del tiempo, aún nos resulta difícil cuantificar el daño que nos produjo como sociedad la última dictadura cívico militar que sufrió nuestro país”. Sin embargo, también enfatizó que “en 1983, en medio de ese dolor, con la figura de don Raúl Alfonsín como símbolo, se gestó esta joven democracia que hoy disfrutamos y ejercemos todos los argentinos”.
A su turno, el legislador del Frente Amplio Justicialista, Juan Manuel Cheppi, destacó que “la política de Estado sobre Derechos Humanos nos posicionó en el mundo. Pero no fue sólo el fruto del accionar político, sino de años de lucha de organismos de Derechos Humanos, Madres, Abuelas, Hijos y Familiares que durante muchos años pusieron el cuerpo en la calle”.
De igual forma, la integrante del bloque PJ-Unidad y Renovación, Patricia Moyano, afirmó: “La mayoría de las víctimas fueron ciudadanos que luchaban con esperanza por sus ideales. En esa lucha, en la que perdimos compañeras y compañeros, fueron mayoritariamente las mujeres las que se organizaron para enfrentar la barbarie: nuestras Madres y Abuelas de Plaza de Mayo”.
Finalmente, el diputado del Frente de Izquierda y de los Trabajadores, Guillermo Kane, intervino y caracterizó el período dictatorial: “Fue una guerra de clase, un golpe a las condiciones de vida de los trabajadores donde la clase obrera luchó como pudo”. Y concluyó: “Desde el Frente de Izquierda llamamos este domingo a estar en la calle para seguir pidiendo Memoria, Verdad y Justicia”.
Entre los oradores también se encontraron: Daniel Ivoskus, Lauro Grande, Susana González, Guillermo Escudero, Mauricio Vivani y Mario Giacobbe.