Investigadores de la Universidad de Jaén, España, lograron generar biocombustibles a partir del orujo húmedo de la aceituna.
(por redacción de Urgente 24)
Investigadores de la Universidad de Jaén, España, lograron generar biocombustibles a partir del orujo húmedo de la aceituna. La investigación se dio en el marco del proyecto OliPFUEL, que lideraron Lourdes Martínez Cartas y Adnan Asad Karim, del Grupo «Bioprocesos».
Biocombustibles a partir del orujo de aceituna: un avance innovador
El objetivo de la investigación era hacer un biocombustible con las sobras del aceite de oliva, para revalorizar un nuevo subproducto. Los investigadores se centraron en este residuo porque Jaén es la principal provincia de España en producción de aceite de oliva.
A partir de este residuo, Martínez Cartas y Asad Karim lograron elaborar bioetanol, biodiésel e hidrochar, un biocombustible sólido. Para conseguir estos resultados, los científicos realizaron técnicas de tratamiento hidrotérmico y procesos biotecnológicos en la biomasa de la oliva.
En un comunicado, desde la UJA explicaron que los biocombustibles fueron conseguidos centrándose en el gran porcentaje de humedad del orujo y sin usar sustancias químicas tóxicas.
La investigadora de la UJA también destacó las propiedades energéticas del hidrochar generado, donde aseguró que “incrementa en un 50% el poder calorífico del orujo original, lo que supone una mejora muy significativa”.
“La revalorización de una sustancia inicialmente residual como el orujo de la aceituna, transformada en subproductos de valor añadido, contribuye a generar un beneficio económico y social, que además soluciona un problema medioambiental”, explica la investigadora Lourdes Martínez Cartas.
Los resultados del proyecto ‘OliPFUEL’ podrán repercutir en Catamarca, La Rioja, Mendoza, San Juan, Córdoba y Buenos Aires, las provincias de Argentina que cultivan aceitunas, en medio de la reciente apertura hacia los biocombustibles por parte del Gobierno Nacional.
El proyecto ‘OliPFUEL’ es financiado por la Unión Europea y en los últimos dos años se desarrolló en el Instituto Universitario de Investigación en Olivar y Aceites de Oliva (INUO) de la UJA y en la Escuela Politécnica Superior de Linares. (Urgente 24)