Vecinos y trabajadores del Frigorífico Pehuajó marcharon ayer por las calles de esa localidad bonaerense para reclamar contra el cierre de la empresa y para exigir el pago de los salarios atrasados.
La compañía depositó unos 3600 pesos para cada uno de los 130 operarios afectados, pero aún debe unos tres meses de salarios y tampoco no hay noticias sobre el futuro de la planta.
Cabe señalar que el frigorífico es una de las empresas que más trabajo da en Pehuajó, y que desde hace tiempo viene atravesando una grave situación económica, que llevó a que a fines del año pasado se registraron irregularidades en el pago de los salarios, que en algunas oportunidades fueron abonados en más de una cuota.
(DIB) FD-MCH