Comenzó la segunda etapa de la obra.

Está prevista su finalización para mediados de diciembre.

La segunda etapa de la obra del Santuario de Fátima comenzó este fin de semana con el regreso a la ciudad de Nueve de Julio  de la artista plástica Mónica Corrales y del historiador en arte Eduardo Gabriel Díaz Hermelo.

Los artistas se encuentran trabajando en este momento en el salón que está ubicado frente al santuario. Allí están abocados a la creación de un mural que abarcará la medianera del patio y que tiene por objeto que la virgen tenga un Jardín permanente.  Para ello se utilizará una  técnica mixta en la que predominará la llamada trencadís. Creada por el famoso artista Antoni Gaudí, consiste en la aplicación ornamental del mosaico a partir de fragmentos cerámicos, básicamente azulejos.  En este caso en particular se complementarán además  con venecitas, vidrios de colores, espejos y fragmentos de porcelanas o lozas. Está técnica se combinará con revoques coloreados, debido a la amplia extensión de la superficie a embellecer.

Durante estos primeros días, los artistas están concentrados en el diseño de las primeras flores ornamentales (rosas, lirios, margaritas y violetas, entre ellas) que se arman sobre mallas que posteriormente se aplicarán al muro.

En estos días también se está llevando adelante la ornamentación del altar para la celebración de la Eucaristía y del ambón para la proclamación de la Palabra de Dios. En ambos casos se usarán restos del antiguo retablo que han sido readaptados para tal fin.

En cuanto a la construcción edilicia, en esta segunda etapa – que tiene prevista su finalización para mediados de diciembre – se construirán rampas de acceso para personas con capacidades disminuidas, la construcción de una columnata al estilo de un claustro para cerrar el jardín de la Virgen, sector de servicios para los peregrinos y se finalizarán algunos detalles ornamentales que quedaron pendientes en la etapa anterior.

Mons. Ariel Torrado Mosconi ha destacado que el santuario de Fátima de Nueve de Julio ya está siendo un refugio de silencio y de paz para la Adoración Eucarística durante todo el día y llama a todos a acercarse con confianza a visitar a la Virgen que brinda consuelo y paz a todos los que se acercan con fe.