El Gobierno bonaerense dio a conocer los números de la tasa de mortalidad infantil de 2018. El porcentaje bajó a 8,9%, luego de los 9,5% que se habían registrado en 2017. En números reales, se trata de 217 fallecimientos menos. Esta caída de 0,6% se suma a un acumulado, que representa un 1% durante toda la gestión de Cambiemos.
Asimismo, con este panorama, la administración provincial aseguró que se trata de un récord histórico. En 2016, primer año de mandato de María Eugenia Vidal, el índice había cerrado en 9,9%. Por ende, 2018 representó el tercer año sostenido de decrecimiento.
Según precisaron, los avances en la materia se han centrado en la regionalización de las maternidades, la intervención primaria de los centros de salud barriales y un seguimiento personalizado a embarazadas y recién nacidos.
En ese sentido, el Gobierno bonaerense analiza desarrollar e incrementar el alcance de programas como Residencia para Madres, que ya funciona en 31 hospitales públicos; el Plan Integral de Guardias Hospitalarias, 43 de las cuales ya han sido refaccionadas y 15 lo serán durante este año; y la iniciativa Camino de la Embarazada, para reforzar los controles del proceso, con atención médica jerarquizada.
Por último, señalaron que se planea mejorar doscientos Centros de Atención Primaria, mediante el Programa Red de Salud Pública, tanto en la infraestructura como en el incremento de recursos humanos. Además, continuarán los planes alimentarios, como Un vaso de leche por día y Más Vida, para asegurar el acceso de alrededor de medio millón de niños y embarazadas a nutrientes necesarios.