Hoy hace 40 años de cuando llevé a Maradona a Río de Janeiro a conocer a Pelé. Fuimos con su padre, don Chitoro, y su amigo y representante, Jorge Cyterszpiler (tanto don Chitoro y sus hijos Lalo y Raúl, como Cyterzpiler, también vinieron a 9 de Julio, para partidos de fútbol los chicos y para congreso deportivo en Atlético). El sueño de Diego por entonces era conocer a Pelé, y pude hacer los contactos a través de El Gráfico, donde trabajaba, y se concretó el lunes 9 de abril de 1979. Una hora junto al legendario fotógrafo don Ricardo Alfieri, amigo de Pelé. El astro brasileño, el mejor de la historia hasta entonces, le dio consejos a Diego, sobre todo que cuidara su cuerpo. «Hay tiempo para todo, pero con equilibrio». Hasta tomó la guitarra y cantó. Y hasta le dijo que sabía que había convertido un gol con la mano, ante Newell’s (siete años antes del que le hizo a Inglaterra en Mëxico ’86. «No te preocupes, eso es un problema del árbitro», ironizó Pelé. Diego volvió con una pelota y una camiseta de Brasil firmadas por Pelé, y un reloj, regalado por el dueño de casa. La nota quedó para la historia. Está en El Gráfico.
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